Una obra que abarca masas de horno como la ensaimada o la coca de Forner; masas fritas como los buñuelos o lo xuixos; tartas intemporales como la de Santiago o la de queso; especialidades con yemas como los tocinillos o los capuchinos; turrones insuperables como el de Cádiz o el de yema tostada... y el brazo de gitano, y los carquiñolis, y las tejas de almendra, y las trufas de chocolate, y el flan chino, y el de huevo, y los canelés, y los diplomáticos...
Un total de 25 dulces, que son lo que son y lo que siempre han sido, con toda su esencia..